Suerte de sábado
Página 1 de 1. • Comparte
Suerte de sábado
Entre las cosas que había extrañado de América estaban las amigas de su hermana, no las conocidas, las amigas. Le sucedía eso porque por alguna razón Violet parecía no tener amigas feas, sus conocidas podían llegar a pasar por trolls –machos- pero su grupo cercano estaba constituido por chicas lindas, cada una un poco más que la anterior aunque todas tenían días en los que parecían brillar más que de costumbre.
Una chica que tenía la costumbre de resaltar era Layla Paxton-Beesley, había sido una de sus fantasías escolares recurrentes desde sexto curso aunque ella apenas tuviese catorce años en ese entonces. Nunca había intentado nada porque estaba chica, en ese tiempo la diferencia de edad parecía abismal pero ahora no lo era o no le importaba porque parecía haber pasado un buen año. Era presidenta de las Theta, se había puesto más guapa, todo parecía tenerlo a su favor.
Encontrársela sola era una de esas rarezas que la vida te regala.-Qué raro que no estés con alguna de tus amigas.-o de sus amigos, o pretendientes. Estaba en su sala común de pura casualidad, de hecho había ido a dejarle unas notas a una chica de su carrera porque no le sirvieron de nada, y allí estaba Layla, como una aparición rosácea.-
Era sábado y si algo podía postergar los planes con los amigos era una compañía así de buena. A las Theta no se las podía ignorar, a la presidenta mucho menos. Si era presidenta era Layla estábamos hablando de cosas grandes, enormes. Y no por esa foto que le enviaron de cuando le aumentaron los senos en el club de duelo. Aún tenía la foto aunque le hubiese causado un problema enorme con su novia de Australia.
-¿Puedes creer que ninguna Theta me ha ayudado a reincorporarme? Un año fuera y no recuerdo nada de lo que había en esta universidad.-puras mentiras, pero nunca se había mostrado muy serio con ella, si había habido algunos veranos en los que había sido la invitada de Violet para las vacaciones tropicales o del tipo que hayan sido.-
De forma tardía le besó la mejilla con la excusa del saludo correspondiente, olía bien, como toda la vida. Pero ahora no se vería como una terrible perversión el acosarla.
-¿Qué dices?
Una chica que tenía la costumbre de resaltar era Layla Paxton-Beesley, había sido una de sus fantasías escolares recurrentes desde sexto curso aunque ella apenas tuviese catorce años en ese entonces. Nunca había intentado nada porque estaba chica, en ese tiempo la diferencia de edad parecía abismal pero ahora no lo era o no le importaba porque parecía haber pasado un buen año. Era presidenta de las Theta, se había puesto más guapa, todo parecía tenerlo a su favor.
Encontrársela sola era una de esas rarezas que la vida te regala.-Qué raro que no estés con alguna de tus amigas.-o de sus amigos, o pretendientes. Estaba en su sala común de pura casualidad, de hecho había ido a dejarle unas notas a una chica de su carrera porque no le sirvieron de nada, y allí estaba Layla, como una aparición rosácea.-
Era sábado y si algo podía postergar los planes con los amigos era una compañía así de buena. A las Theta no se las podía ignorar, a la presidenta mucho menos. Si era presidenta era Layla estábamos hablando de cosas grandes, enormes. Y no por esa foto que le enviaron de cuando le aumentaron los senos en el club de duelo. Aún tenía la foto aunque le hubiese causado un problema enorme con su novia de Australia.
-¿Puedes creer que ninguna Theta me ha ayudado a reincorporarme? Un año fuera y no recuerdo nada de lo que había en esta universidad.-puras mentiras, pero nunca se había mostrado muy serio con ella, si había habido algunos veranos en los que había sido la invitada de Violet para las vacaciones tropicales o del tipo que hayan sido.-
De forma tardía le besó la mejilla con la excusa del saludo correspondiente, olía bien, como toda la vida. Pero ahora no se vería como una terrible perversión el acosarla.
-¿Qué dices?
- Jude Wildenstein
Mensajes :
234
Re: Suerte de sábado
Últimamente sí pasaba mucho tiempo sola, lo utilizaba para estudiar. Cuando sus compañeras en TPA salían a hacer alguna actividad en conjunto, ella aprovechaba para estudiar. Ahora se incorporaba un poco tarde a los juegos, pero era un sacrificio que Layla podía hacer con tal de que no le quitaran la presidencia, que parecía estar tan de moda que sucediera ahora.
Pero ya había terminado de estudiar por ese día y cerró sus libros para alcanzar a sus compañeras en la fiesta improvisada que le estaban haciendo a Emelinda Johnson en el spa. Estaba guardando sus cosas en su mochila cuando llegó Jude. Alzó la mirada para verlo bien y sonrió, lo reconoció de inmediato porque era el hermano de una de sus mejores amigas y lo había visto muchísimo antes de que se fuera.
-Justo iba a alcanzarlas. Como presidenta tengo que darme el tiempo de mantener mis notas altísimas y poner el ejemplo.-De haber sabido que Jude tenía una foto de ella cuando le habían hecho una cirugía no pedida en los senos en el club de duelo, se hubiera sonrojado hasta la punta de los pies.
-Que malas nos hemos vuelto. Ahora mismo puedo darte un recorrido para refrescarte la memoria. -Puso la mejilla para que la saludara y le devolvió a cambio una sonrisa coqueta, tampoco iba a dejar caer toda la artillería pesada en el hermano de Violet, siempre lo había recordado como un prototipo inalcanzable de hombre y aunque ahora fuera la presidenta, esa percepción de lo que pensaba de él no iba a cambiar, aunque en sí para ella, como para muchas TPA, muchos de los chicos de su fraternidad de hombres deportistas fueran un sueño.
-¿A dónde quieres ir? ¿Cuál es la zona universitaria que más se ha borrado de tu mente?-Dejó la mochila en cualquier parte y se colgó del brazo de Jude, la reunión de chicas en el spa podía esperar, ellas lo entenderían.
Pero ya había terminado de estudiar por ese día y cerró sus libros para alcanzar a sus compañeras en la fiesta improvisada que le estaban haciendo a Emelinda Johnson en el spa. Estaba guardando sus cosas en su mochila cuando llegó Jude. Alzó la mirada para verlo bien y sonrió, lo reconoció de inmediato porque era el hermano de una de sus mejores amigas y lo había visto muchísimo antes de que se fuera.
-Justo iba a alcanzarlas. Como presidenta tengo que darme el tiempo de mantener mis notas altísimas y poner el ejemplo.-De haber sabido que Jude tenía una foto de ella cuando le habían hecho una cirugía no pedida en los senos en el club de duelo, se hubiera sonrojado hasta la punta de los pies.
-Que malas nos hemos vuelto. Ahora mismo puedo darte un recorrido para refrescarte la memoria. -Puso la mejilla para que la saludara y le devolvió a cambio una sonrisa coqueta, tampoco iba a dejar caer toda la artillería pesada en el hermano de Violet, siempre lo había recordado como un prototipo inalcanzable de hombre y aunque ahora fuera la presidenta, esa percepción de lo que pensaba de él no iba a cambiar, aunque en sí para ella, como para muchas TPA, muchos de los chicos de su fraternidad de hombres deportistas fueran un sueño.
-¿A dónde quieres ir? ¿Cuál es la zona universitaria que más se ha borrado de tu mente?-Dejó la mochila en cualquier parte y se colgó del brazo de Jude, la reunión de chicas en el spa podía esperar, ellas lo entenderían.
- Layla Paxton-Beesley
Mensajes :
48
Re: Suerte de sábado
Layla Paxton-Beesley era linda desde donde se le viese, con ella no iba a ser tan perro como con Harley porque ella era su amiga, una muy guapa que le despertaba ideas pero se contenía porque no era como cualquiera. No sabía de sus tendencias cleptómanas porque V nunca le dijo de eso, lo que resultaba evidente a sus ojos era que cada vez que regresaba de viaje parecía más bonita, tenía un encanto por el que muchas matarían.
Por mucho que dijesen que las TPA eran tontas su presidenta no caía en esa categoría, de hecho varias lo hacían pero ya se había generalizado tanto esa idea que ni con demostraciones evidentes de lo contrario la gente entendía. Una prueba era que bastaba su excusa de viejos amigos para que ella hubiese notado –seguramente- que había babeado un poco al verla y que cualquier excusa era buena para pasar un rato con ella.
Estuvo a nada de decirle que no se acordaba de la habitación de la presidenta de las Theta pero no, eso se sentía ya muy perverso, además estaba pensando en invitar a salir a Jessica Snyder y con el escándalo de Harley le bastaba. Pero maldita sea, Layla no le ponía las cosas fáciles.
-Vamos a donde quieras, no se me ha ocurrido nada muy sagaz para decirte. Te invito a beber algo, así me pones al día que llegué para toparme con cada cosa rara…nunca creí ver a Vi hablándole al imbécil de Lucian, por ejemplo.
Cambió con prontitud su cara de malas pulgas pero esas cosas eran las que lo jodían. Así como Mina que volvió con Crawford en nombre del amor, pero a ella no iba a darle sermones porque él ni había terminado del todo con su novia de Australia.
-Tú no te has estado juntando con tus ex novios matones, ¿cierto?-le pasó un brazo por detrás de los hombros para cuestionarle mirándola a los ojos. Ella le causaba grandes juicios de moral, por un lado le encantaba y por el otro se preocupaba por ella como si fuese una prima. No una hermana que tampoco dejaba de verla caminar, quizá hasta una prima en tercer grado.-
-Antes de que lo olvide, te tengo un recado de Violet. Se me va a calcinar la boca cuando te lo diga.
Por mucho que dijesen que las TPA eran tontas su presidenta no caía en esa categoría, de hecho varias lo hacían pero ya se había generalizado tanto esa idea que ni con demostraciones evidentes de lo contrario la gente entendía. Una prueba era que bastaba su excusa de viejos amigos para que ella hubiese notado –seguramente- que había babeado un poco al verla y que cualquier excusa era buena para pasar un rato con ella.
Estuvo a nada de decirle que no se acordaba de la habitación de la presidenta de las Theta pero no, eso se sentía ya muy perverso, además estaba pensando en invitar a salir a Jessica Snyder y con el escándalo de Harley le bastaba. Pero maldita sea, Layla no le ponía las cosas fáciles.
-Vamos a donde quieras, no se me ha ocurrido nada muy sagaz para decirte. Te invito a beber algo, así me pones al día que llegué para toparme con cada cosa rara…nunca creí ver a Vi hablándole al imbécil de Lucian, por ejemplo.
Cambió con prontitud su cara de malas pulgas pero esas cosas eran las que lo jodían. Así como Mina que volvió con Crawford en nombre del amor, pero a ella no iba a darle sermones porque él ni había terminado del todo con su novia de Australia.
-Tú no te has estado juntando con tus ex novios matones, ¿cierto?-le pasó un brazo por detrás de los hombros para cuestionarle mirándola a los ojos. Ella le causaba grandes juicios de moral, por un lado le encantaba y por el otro se preocupaba por ella como si fuese una prima. No una hermana que tampoco dejaba de verla caminar, quizá hasta una prima en tercer grado.-
-Antes de que lo olvide, te tengo un recado de Violet. Se me va a calcinar la boca cuando te lo diga.
- Jude Wildenstein
Mensajes :
234
Re: Suerte de sábado
Layla tampoco sabía que Violet ya le había dirigido otra vez la palabra a Lucian Den Adel. Debió ser en una fiesta plagada de gente o algún lugar en donde Layla no puso mucha atención. Le sorprendió pero no dijo nada para no echar más leña al fuego porque notó que Jude se molestaba un poco por el tema.
-Esta bien y así me cuentas todo lo que hiciste mientras estabas lejos de nosotras. Que bueno que volviste también a la fraternidad, nunca está de más otro chico guapo.-Mantuvo su coqueteo con muy bajo perfil porque Violet seguía siendo un tema delicado y nunca sería tan mala amiga como para intentar algo con su hermano sin contar con su femenina aprobación, por tener decencia, que en todos los demás aspectos carecía de ella.
-No tengo ni un solo ex novio matón. Miles se fue del país y a Nick tiene mucho que no lo veo. -Hasta ahí terminaba su lista de ex novios formales, porque los demás solamente habían sido un rollo pasajero y nada oficial. Le regresó la mirada directamente a los ojos sin ponerse nerviosa por más lindos que los tuviera, era como una atleta olímpica en fingir que no le afectaban los hombres hasta que era hora de demostrarles que sí.
-Salimos a tomar algo, ¿entonces? Al regresar te puedo dar ese tour que tanta falta te hace.-Una vez fuera de la fraternidad pensó en un buen lugar donde pudieran beber algo, como era un ANE seguramente tendrían gustos similares en cuanto a lugares.-Déjame pensar a donde llevarte.-Se golpeó la barbilla con la punta del dedo índice, pero detuvo el pensamiento de opciones por lo del recado.-¿Qué es lo que me manda decir?
-Esta bien y así me cuentas todo lo que hiciste mientras estabas lejos de nosotras. Que bueno que volviste también a la fraternidad, nunca está de más otro chico guapo.-Mantuvo su coqueteo con muy bajo perfil porque Violet seguía siendo un tema delicado y nunca sería tan mala amiga como para intentar algo con su hermano sin contar con su femenina aprobación, por tener decencia, que en todos los demás aspectos carecía de ella.
-No tengo ni un solo ex novio matón. Miles se fue del país y a Nick tiene mucho que no lo veo. -Hasta ahí terminaba su lista de ex novios formales, porque los demás solamente habían sido un rollo pasajero y nada oficial. Le regresó la mirada directamente a los ojos sin ponerse nerviosa por más lindos que los tuviera, era como una atleta olímpica en fingir que no le afectaban los hombres hasta que era hora de demostrarles que sí.
-Salimos a tomar algo, ¿entonces? Al regresar te puedo dar ese tour que tanta falta te hace.-Una vez fuera de la fraternidad pensó en un buen lugar donde pudieran beber algo, como era un ANE seguramente tendrían gustos similares en cuanto a lugares.-Déjame pensar a donde llevarte.-Se golpeó la barbilla con la punta del dedo índice, pero detuvo el pensamiento de opciones por lo del recado.-¿Qué es lo que me manda decir?
- Layla Paxton-Beesley
Mensajes :
48
Re: Suerte de sábado
Layla tenía ese algo por lo que muchas matarían, bastaba con su presencia para hipnotizar a cualquier ay ni siquiera necesitaba coquetear de forma directa porque siempre parecía invitar a lo ilegal. Sus halagos no sonaban forzados, tenía carisma de semiveela sin que se le asociase con lo superficial, había que ser justo, por guapas que fuesen las veelas y las semiveelas nadie en su sano juicio se enamoraría de una. Que lo perdonase Madison.
No estaba ahí para contarle chismes o para comenzar a hablar de las relaciones de su hermana, le bastaba tener que darle un recado de ella. Intentaba formar las palabras exactas en su mente porque la forma en la que ahora lo pensaba decir no sonaba ni la mitad de convincente.
-Era algo acerca de que deberías inclinar la balanza hacia Bill como pareja para la fiesta de su fraternidad, la de las Epsilon. Me dio una razón buena, creo, pero honestamente ser el verdugo de tus pretendientes me ha estresado tanto que no la recuerdo.-rió antes de pasarle un brazo por detrás de los hombros nuevamente en un gesto protector mientras ya se dirigían a beber algo.-
Aceptó que lo llevase a donde quisiese porque con una chica así se iba uno al infierno sin chistar, y no sólo por lo guapa o porque ya provocase envidia a todos los que lo veían pasar con ella, era porque era genuinamente agradable.-¿Alguna vez has jugado billar? Hay un sitio que tiene como cien años aquí cerca, no es muy elegante pero creo que te adaptarás bien.
Además tenían una fantástica cerveza, podían picar algunas papas fritas o lo que ella quisiese mientras que aprovechaba para presumir sus habilidades de Alpha. No era muy bueno para los estudios pero los deportes eran su fuerte, no podía consigo mismo, le gustaba la atención que generaban sus movimientos suicidas sobre la mesa de pool.
-Mientras veme contando acerca de las mil propuestas de amor que te han hecho esta semana, tengo que cuidarte de pelafustanes sin futuro. Ya sabes que si no eliges a uno hasta los veinticinco me has sido prometida.
No estaba ahí para contarle chismes o para comenzar a hablar de las relaciones de su hermana, le bastaba tener que darle un recado de ella. Intentaba formar las palabras exactas en su mente porque la forma en la que ahora lo pensaba decir no sonaba ni la mitad de convincente.
-Era algo acerca de que deberías inclinar la balanza hacia Bill como pareja para la fiesta de su fraternidad, la de las Epsilon. Me dio una razón buena, creo, pero honestamente ser el verdugo de tus pretendientes me ha estresado tanto que no la recuerdo.-rió antes de pasarle un brazo por detrás de los hombros nuevamente en un gesto protector mientras ya se dirigían a beber algo.-
Aceptó que lo llevase a donde quisiese porque con una chica así se iba uno al infierno sin chistar, y no sólo por lo guapa o porque ya provocase envidia a todos los que lo veían pasar con ella, era porque era genuinamente agradable.-¿Alguna vez has jugado billar? Hay un sitio que tiene como cien años aquí cerca, no es muy elegante pero creo que te adaptarás bien.
Además tenían una fantástica cerveza, podían picar algunas papas fritas o lo que ella quisiese mientras que aprovechaba para presumir sus habilidades de Alpha. No era muy bueno para los estudios pero los deportes eran su fuerte, no podía consigo mismo, le gustaba la atención que generaban sus movimientos suicidas sobre la mesa de pool.
-Mientras veme contando acerca de las mil propuestas de amor que te han hecho esta semana, tengo que cuidarte de pelafustanes sin futuro. Ya sabes que si no eliges a uno hasta los veinticinco me has sido prometida.
- Jude Wildenstein
Mensajes :
234
Re: Suerte de sábado
No se podía creer que Violet le estuviera pidiendo que contemplara a Bill para ir con él a la fiesta de aniversario. Todas sabían que tenía su mal carácter, que estaba enamorado de Mina Schweinsteiger y que se emborrachaba muy fácil en las fiestas pero fuera de eso, era el sueño de cualquiera, o al menos de cualquier TPA que no fuera una ciega. Era el presidente de los alpha nu épsilon y además muy guapo, a ella siempre le había gustado pero jamás se había visto con oportunidad, hasta ese momento.
Pero no tenía que subírsele a la cabeza muy rápido y primero lo primero, que era atender a Jude.-Pues si él viene y me lo pide, claro que seguiré el consejo de Violet.-Contestó neutral para no sonar como niñita emocionada.
A Layla le importaban mucho esos temas sobre cómo se veía ante la sociedad y como la percibían los demás. Y se esforzaba mucho por que la quisieran y por ser sociable y encantadora como se suponía debía ser una TPA, se esforzaba en poner atención a detalles como su ropa o su manera de expresarse con la gente y sobre la gente, le importaba mucho ser aceptada, tanto como de niña le había importado encajar.
-Sí he jugado billar y te advierto que soy muy buena.-Le dijo mientras con un brazo le rodeaba la cintura para ponerse en marcha, sonriendo radiante. Jugar billar y el volleyball de playa eran los únicos deportes en los que era buena, para lo demás era un completo desastre.
-No he tenido mil propuestas de amor esta semana, solo quinientas. Parece que estoy perdiendo el toque. Pero no acepté a ninguno, sabía que tú vendrías y tú vales por quinientos de esos otros. ¿Y tú? ¿Has hecho mil propuestas de amor esta semana?-Siempre había sido algo coqueto y además irresistible así que no le sorprendería.
Pero no tenía que subírsele a la cabeza muy rápido y primero lo primero, que era atender a Jude.-Pues si él viene y me lo pide, claro que seguiré el consejo de Violet.-Contestó neutral para no sonar como niñita emocionada.
A Layla le importaban mucho esos temas sobre cómo se veía ante la sociedad y como la percibían los demás. Y se esforzaba mucho por que la quisieran y por ser sociable y encantadora como se suponía debía ser una TPA, se esforzaba en poner atención a detalles como su ropa o su manera de expresarse con la gente y sobre la gente, le importaba mucho ser aceptada, tanto como de niña le había importado encajar.
-Sí he jugado billar y te advierto que soy muy buena.-Le dijo mientras con un brazo le rodeaba la cintura para ponerse en marcha, sonriendo radiante. Jugar billar y el volleyball de playa eran los únicos deportes en los que era buena, para lo demás era un completo desastre.
-No he tenido mil propuestas de amor esta semana, solo quinientas. Parece que estoy perdiendo el toque. Pero no acepté a ninguno, sabía que tú vendrías y tú vales por quinientos de esos otros. ¿Y tú? ¿Has hecho mil propuestas de amor esta semana?-Siempre había sido algo coqueto y además irresistible así que no le sorprendería.
- Layla Paxton-Beesley
Mensajes :
48
Re: Suerte de sábado
No tenía idea de los líos amorosos de Bill porque las horas de conversación se las había pasado defendiendo a su equipo de quodpot favorito contra el de su presidente y preguntando por la estrategia del hockey aéreo porque planeaba reintegrarse al equipo. Eso y las apuestas que ya habían hecho acerca del mundial, no tardaría en empezar y tenía planes para la final pero no para todos los partidos, tendría que faltar a algunas clases pero tendrían que entenderlo.
No notó el entusiasmo que pudo acompañar inconscientemente las palabras de Layla, no tenía idea del crush instantáneo que producía Bill porque jamás tuvo ese efecto en él pero sí había visto a varias chicas parecer con un ligero retraso cuando lo veían, no todas tenían el manejo de gente que la presidenta TPA. Lo que le alegraba era que por lo menos su hermana no participaba de ese grupo, más bien parecía la casamentera.
Mientras caminaban notó las miradas de algunos que lo veían pasar con ella, al primer comentario que le pareció inapropiado –un simple qué buen regreso Jude- mandó a callar al gracioso con un humor que nada tenía que ver con el risueño que le producía Layla.
-Sólo a ti te amo, ¿no lo sabes? Es esta maldita distancia que quebró nuestro amor.-mueca de dolor antes de esquivar un escalón poco estable para salir finalmente a lo que resultó ser una tarde de lluvia intensa.-Parece que el cielo nos dijese que nuestro amor debe vivir, eso significa esta lluvia. Me lo dijo un Lovecraft.
No sabía si ahora se llevaba bien con esa familia que tenía sólo miembros pintorescos, uno más loco que el anterior, Marcellus parecía ser el primero de la fila porque todos los que le seguían iban aumentando esa intensidad innecesaria. Ni qué decir de Darren, hasta ahora le debía una buena explicación. Viéndose como una parejita que llevaba apenas una semana de pasional amor se quedaron parados con la lluvia a sus pies, cubiertos por el edificio de la universidad.
Jude sacó su varita y tras un movimiento tantas veces usado aparecieron afuera del billar, la lluvia en el rostro fue inmediata, le dio la mano y dejó que pasase primero, tenían que bajar una escalera corta y tocar, ya no tenían techo que lo protegiese así que intentó usar su brazo para cubrirla un poco. Tocó dos veces con la mano que tenía libre esperando que abriesen.
No notó el entusiasmo que pudo acompañar inconscientemente las palabras de Layla, no tenía idea del crush instantáneo que producía Bill porque jamás tuvo ese efecto en él pero sí había visto a varias chicas parecer con un ligero retraso cuando lo veían, no todas tenían el manejo de gente que la presidenta TPA. Lo que le alegraba era que por lo menos su hermana no participaba de ese grupo, más bien parecía la casamentera.
Mientras caminaban notó las miradas de algunos que lo veían pasar con ella, al primer comentario que le pareció inapropiado –un simple qué buen regreso Jude- mandó a callar al gracioso con un humor que nada tenía que ver con el risueño que le producía Layla.
-Sólo a ti te amo, ¿no lo sabes? Es esta maldita distancia que quebró nuestro amor.-mueca de dolor antes de esquivar un escalón poco estable para salir finalmente a lo que resultó ser una tarde de lluvia intensa.-Parece que el cielo nos dijese que nuestro amor debe vivir, eso significa esta lluvia. Me lo dijo un Lovecraft.
No sabía si ahora se llevaba bien con esa familia que tenía sólo miembros pintorescos, uno más loco que el anterior, Marcellus parecía ser el primero de la fila porque todos los que le seguían iban aumentando esa intensidad innecesaria. Ni qué decir de Darren, hasta ahora le debía una buena explicación. Viéndose como una parejita que llevaba apenas una semana de pasional amor se quedaron parados con la lluvia a sus pies, cubiertos por el edificio de la universidad.
Jude sacó su varita y tras un movimiento tantas veces usado aparecieron afuera del billar, la lluvia en el rostro fue inmediata, le dio la mano y dejó que pasase primero, tenían que bajar una escalera corta y tocar, ya no tenían techo que lo protegiese así que intentó usar su brazo para cubrirla un poco. Tocó dos veces con la mano que tenía libre esperando que abriesen.
- Jude Wildenstein
Mensajes :
234
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.