What if i told you Ferdynand....

De verdad que ese pobre tipo no tenía ni idea, y ya no sabía si sentir furia o compasión por él. Parecía loco y quizá lo estaba. En primer lugar, no entendía de dónde se sacaba aquello de que había llegado a Norteamérica huyendo, cuando realmente había sido todo lo contrario. Lo miró incrédulo por no saber de dónde sacaba tanta locura, de dónde sacaba eso de que había pensado que sería fácil y por qué se esforzaba tanto y tanto en demostrar ser superior en cualquier cosa, por cualquier medio, siempre demeritando, siempre intentando pisotear. Le chocaba sentir una conexión tan intensa con alguien tan despreciable.

Arqueó una ceja cuando se mostró herido por quién sabía qué. Pero sí se alarmó cuando le dijo que un miembro de la Secta había muerto, aunque no le había dado más información que esa. Ante sus gritos de niño que se sentía dueño de las vidas de la gente, Ferdynand solo respondió un “fuck off” mientras le mostraba el dedo medio. ¿Quién se pensaba que era? Podía irse a intentar pasar por encima de quien lo aguantara, de él no, naturalmente, no importaba con cuanta ansiedad necesitara sentirle cerca por ese perro nodo maldito.

Como su celular se había quedado en la alfombra, tirado, solo le quedaba su varita y tuvo que mandar un patronus entonces, a Carol O’Tull, la chica a la que Jesse había asignado vigilar a Finnerty.

Carol, dame la situación del perro.

Se encontró a Pearlie en el camino a la salida pero no le dijo nada, sabía que si algo había pasado con Werther y Angus como todos se habían temido durante ese tiempo, ella no lo iba a tomar nada bien. Apenas salió de la casa, recibió el patronus de Carol de nuevo.

Está muerto. Jesse se lo llevó. No hemos podido rastrear a dónde. Schweinsteiger está muerto también.

Se detuvo en la entrada de la casa de Pearlie un segundo y tomó aire. Uno más. Y encima era Angus. No sabía cómo iban a tomar la noticia los demás, cómo iba a tomarla Joe, Connie, Loulou, incluso Kate, o peor, los Alechinsky que estaban asentados ahí en América, Aquila, Regan. Pero Angus había sido muy claro en lo que había pedido. Ahora lo importante era encontrar a Jesse y saber hasta qué punto eso había escalado más de lo normal. Quizá incluso la conferencia tuviera que adelantarse. Detalles.

Un nuevo patronus tuvo como intención buscar a Jesse. El mensaje era simple. “Tu situación actual”, nada más.